Por: Arturo Méndez
Roger Federer entretuvo a México con su elegancia.
El suizo derrotó a Alexander Zverev en los últimos dos sets por 3-6, 6-4 y 6-2 en la Monumental Plaza de Toros, 42 mil 517 almas rompieron récord mundial y fueron testigos del tenis a medio gas de “Su Majestad” que se retiró con la promesa de volver.
“A lo mejor puedo hacer otro partido de exhibición en México, en otra ciudad. Tengo 38 años, es difícil. Pero les aseguro que volveré”, comentó Federer al final del encuentro.
Un lleno total y la euforia por observar un encuentro prometedor entre el más ganador en la historia de este deporte y la joven promesa del mismo inundaron los alrededores de la Colonia Noche Buena en la capital mexicana para este encuentro.
Juventud contra experiencia, el cercano retiro contra el surgimiento, la potencia contra la elegancia, Roger cara a cara con Alexander en un partido que sostuvo más interacción con la grada que con la pelota, pero que dejo buenas sensaciones de la organización y el trabajo de las autoridades mexicanas.
Gritos de los asistentes que por momentos captaron la atención de los protagonistas, sin embargo, Roger Federer bailó, saltó y se divirtió en suelo Azteca.
Al ritmo de la tradicional pero emotiva canción mexicana “Cielito Lindo” el histórico y majestuoso Roger Federer se retiró de la cancha, que tardó más de 140 horas de montaje. Así la noche de hoy, entró a los libros de historia del deporte blanco; en donde, más tarde, se buscará repetir y superar las expectativas del público mexicano.